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CONCEPTOS A TENER EN CUENTA PARA MEDITAR
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Esto que voy a explicar a continuación puede parecer un rollo pero es necesario para ayudar a conseguir el silencio interior. Yo no tenía ni idea de en qué mundo vivía hasta que aclaré estas cosas. Vivía en otro planeta como quien dice. Es necesario leer esto intentándolo descubrir por uno mismo y no dando por cierta cada cosa que cuento. Lo divido en dos partes. La primera son definiciones de conceptos relacionados con el tema. La segunda son aclaraciones básicas sobre lo que es el amor, el miedo la muerte, el orden... Cosas que yo creí tenerlas muy claras antes de esto pero que me di cuenta que no tenía ni pajolera idea.
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1. APRENDER DE SÍ MISMO
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Para aprender de sí mismo es necesario eliminar al observador. El observador es todo lo que tenemos en la memoria: condicionamientos, tradiciones, prejuicios...
También es necesario eliminar toda autoridad. Una autoridad puede ser tu padre o un profesor. Una marca de ropa o un científico que te dice que el cambio climático no existe porque él ha hecho tal estudio...
Hay que mirar a los demás eliminando lo que sabemos de ellos.
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La violencia surge cuando hay división entre lo observado y el observador. Esto suena dramático pero es así. Toda violencia aparece cuando la persona que genera esa violencia observa algo que considera que es como debe ser. Por ejemplo pegar a alguien porque vote un partido político distinto al suyo. Tenemos una imagen y condicionamiento hacia las cosas. Eliminar todo esto es el acto de aprender.
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Cuanto más sabes de ti mismo más libertad tienes.
El conocimiento impide la percepción y la libertad para observar.
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COMENTARIOS:
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Tenemos la mente llena de basura que hemos ido aprendiendo a lo largo de nuestra vida y dando por bueno porque sí.
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Todo lo que nos decían en el colegio, nuestros padres, amigos...
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Para poder empezar a meditar de verdad hay que deshacerse de todo esto.
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Esto es el SILENCIO INTERIOR tan comentado en las disciplinas descritas en el menú de ILUMINACIÓN que tenemos arriba a la derecha de la página.
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2. LIBERAR LA MENTE DEL MIEDO
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El miedo surge de la comparación. Es un movimiento de alejamiento de lo real. A contrario de lo que se piensa el miedo no se elimina con un pensamiento del tipo "No voy a tener miedo" o "voy a ser valiente".
Hay temores conscientes y temores escondidos. El pensamiento origina el temor. El temor no puede liberarse por medio del análisis. El análisis implica tiempo e implica al analizador (generalmente un psicólogo). El analizador también implica tiempo y conocimiento previo.
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"Yo tuve dolor la semana pasada y no quiero tenerlo hoy". El pensamiento origina el temor y el placer. Placer y temor están relacionados.
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Para comprender las cosas primero hay que saber lo que no son. El gozo no es el placer. El gozo es la sensación que ocurre en ese momento. Placer es el recuerdo de ese gozo. Por lo tanto el placer lo genera el pensamiento.
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El temor es la respuesta de la memoria al recuerdo de la experiencia vivida. En el momento que nombras una cosa que temes la divides y estás en el pasado.
Al observar sin esa división desaparece el temor.
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COMENTARIOS:
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Todas estas cosas son tan evidentes que suenan a perogrullo. Por favor que ningún psicólogo se ofenda pero cuando digo que el analizador no sirve para quitar un temor es porque esto implica un conocimiento previo. El analizador dará su solución respecto a lo que sabe. El conocimiento es limitado. Por mucho que uno sepa siempre podrá saber más y si añadimos a esto el tiempo, el conocimiento que puede tener una persona es ínfimo respecto al total.
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La solución es salirse del conocimiento para eliminar el temor. Si uno tiene miedo a las arañas lo único que tiene que hacer es eliminar de la mente la impresión que en su día le produjeron las arañas.
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Uno puede tener miedo al dolor pero si va al dentista porque tiene una boca horrible. Pero puede estar pasando ese dolor feliz sabiendo que su boca cambiará. Hay que ser capaz de eliminar la impresión que nos produce una sensación. Deshacerse del conocimiento. Tal y como decían en la película Avatar "es difícil llenar una copa que ya está llena".
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2. ORDEN
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Nuestra mente vive en el desorden completo. Es esclava de sus anhelos y apetitos. Es necesaria la libertad interna. En todos los medios de comunicación se habla de libertad religiosa, política, de expresión... Nunca se habla de libertad interna.
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Sin embargo no somos libres. Solo tenemos opciones donde elegir. Si hay opciones para elegir no hay libertad. Cuando se ven las cosas claras no hay elección. El color blanco es blanco para todo el mundo. No es opinable. No hay confusión.
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Al igual que en matemáticas solo existe una solución para cada problema en la vida. Cuando se tiene la mente libre no hay elección. Las cosas son como son. Una mente confusa, desordenada, es la que elige.
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Antes de comprender la meditación ha de haber cese de conflictos y perturbaciones internas. En el momento que piensas en términos de cómo debería ser tu vida estás esquivando tu vida real. Tenemos lucha interna y frustración. La frustración aparece porque nunca hemos entendido lo que es realizarse. Creemos que ees llegar a ser presidente, actor, rico, famoso...
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Todo esto trae desorden. Queremos huir de todo esto generando nacionalismos, entretenimientos, religión... Todo esto genera conflicto y desorden.
Es necesaria disciplina de observación. Observar con los conocimientos aprendidos genera conflicto. Hay que observar todo como si fuera la primera vez.
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COMENTARIOS: Es necesario trabajar en el SILENCIO INTERIOR. Mientras insistamos en juzgar y observar todo mediante lo conocido seguiremos inmersos en la confusión. El orden aparece cuando terminamos con esto.
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3. AMOR Y MUERTE
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Tal y como he dicho antes es necesario saber lo algo no es para saber lo que es.
¿QUÉ ES EL AMOR? El amor no son los celos, envidia, pasión, sexo, placer... No se puede definir algo como el conjunto de otras cosas. El amor tiene su definición al igual que todo lo demás.
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Los celos surgen del temor por perder a alguien y por la envidia. Ya hemos definido lo que es el temor y que este surge de la comparación . Con la envidia pasa lo mismo. Esta surge de la comparación. Eliminando la comparación desaparece la envidia.
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El amor no es la pasión o el sexo. Un puede ser muy pasional o sexual y luego dedicarse a matar animales o personas a diestro y siniestro. El sexo es un gozo que proporciona placer.
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El amor no es placer. Este es fruto del pensamiento. Este desaparece cuando uno anula el recuerdo de la sensación que le produjo placer. Por ejemplo el sexo que tuvo con esa persona.
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Para comprender que es el AMOR primero tenemos que entender la muerte. La muerte es la desaparición del yo. De todo el contenido que hay en nuestra mente. Es decir deshacerse de un plumazo de todo lo que hemos metido en nuestra memoria durante toda nuestra vida. Hay que morir todos los días. Eso es lo que hacemos al ir a dormir.
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En el momento que uno "muere" empieza a ver a los demás como si fuera la primera vez. Cuando ves al vecino del quinto no recuerdas la discusión que tuviste aquella vez y eso no te hace ponerte de pelos nada más verlo. Lo saludas como si fuera la primera vez y así lo tratas. Tienes que morir para tu placer, morir para tus muebles, para tu conocimiento, para tu acumulación...
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El AMOR es vaciar la mente de todo lo conocido y volverla inocente. Solo una mente así puede llegar a la iluminación.
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COMENTARIOS: hay un gran paralelismo en volver a ser un niño. Los niños tienen la mente vacía. Solo así es posible el amor. A no ser que tengas unos problemas muy serios todo el mundo ama a un bebé. El motivo es porque su mente está vacía. No puedes predisponerte a pensar nada de él. Lo mismo hay que hacer con los demás. Volverte un niño y ver a los demás como niños.
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4. MENTE RELIGIOSA
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Una mente religiosa no es la que se pone sus mejores vestiduras y va los domingos a misa para que los demás vean lo creyente que es. No es la que hace actos de bondad públicamente para autosatifacerse. No es nada de lo que creemos que es.
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La palabra religión viene del latín "religare". Esto significa atar, amarrar, reunir. Religión es unir todas tus fuerzas para llevar a cabo la tarea que tienes. En este caso encontrar a Dios, El Todo, El Más Allá o como lo queramos llamar.
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Una mente religiosa es la que reúne estas condiciones. Poner todo su empeño en esto.
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Para ello es necesario olvidar toda cultura, tradición y hábitos. Libertad total. Emociones, afecto, amor, cariño, capacidad intelectual... todo eso hay que retarlo en su totalidad o viviremos en desorden.
5. ESCUCHAR
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No escuchamos. En el momento que una persona nos cuenta algo sobre el tema que sea, prejuzgamos antes de que haya terminado su exposición con nuestro conocimiento previo. Antes de que haya terminado ya tenemos la respuesta que dar. Es decir lo convertimos en amigo o enemigo según lo que nos parezca.
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Es necesario escuchar sin tener diálogo interno. Escuchar y nada más. Esperar a que el otro haya terminado y a partir de ahí empezar a valorar sin tener en cuenta lo que conozcamos o no sobre el tema.
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Un claro ejemplo de esto son las discusiones de política en cualquier familia o círculo de amigos.
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Cuando discutimos con alguien tenemos que llegar entre los dos a un camino. Juntos. Mal vamos si una discusión se convierte en " Yo intento convencerte de mi opinión y tu intentas convencerme de la tuya, después de unos gritos terminamos los dos y nos vamos".
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Tal y como dije antes solo existe una solución para cada problema en la vida. En cuanto existe la opinión hay confusión.

Cada vez que nos ponemos a "escuchar" a otros suena en nosotros nuestro diálogo interno.